viernes, 7 de noviembre de 2008

lA mIsMa PeRsOnAlIdAd De Su MaDrE



"Selena tenía la misma personalidad que mi esposa",
dice Abraham. "Si yo veo una discrepancia, enseguida me pongo alerta. Pero ella podía ver 20 discrepancias y luego, cuando finalmente están listas para actuar, dicen, `Bueno, quizás ellos necesitaban el dinero más que yo".

En Marzo, Abraham había acusado a Saldívar de defalcar las tiendas y el club de admiradores. La familia había encontrado cuatro cheques, incluyendo uno por 3.000 dólares, que ella se había escrito a su nombre de la cuenta del club.

"Si alguna vez han visto a un animal acorralado, saben como reaccionó ella", dice.

Abraham no tenía forma de saber que unos días antes de la confrontación, Saldívar había comprado un revolver de calibre 38 en San Antonio.

"Sé que Selena hizo la decisión de despedirla", dice Manolo Gonzalez. "Pero por su naturaleza, se lo quería decir delicadamente. La quería despedir de una manera que les permitiera continuar siendo amigas.

"Creo que Selena vió en ella una persona dedicada, alguien en quien podía confiar. Selena era muy confiada".

Durante los últimos días de marzo, Selena mandó a Saldívar a Monterrey, México, donde estaba planeando abrir una tienda nueva. Saldívar dijo que cuando regresara le daría documentos del banco que establecerían su inocencia.

Cuando estaba cruzando la frontera, Saldívar llamó a Selena para decirle que le habían robado su auto y la habían raptado y violado. Sonaba histérica por el teléfono. Selena pensó que le estaba dando largas al asunto. Pero la cantante todavía tenía fe en que su padre estaba equivocado acerca de Saldívar. Ella insistió en que Saldívar viera a un doctor cuando llegara a Corpus.

El jueves en la noche, 30 de marzo, Saldívar llamó a Selena desde el motel Days Inn en la calle Navigation, no muy lejos de la oficina de produccion y estudio de la compañía productora Q. Pero cuando Chris y Selena llegaron al motel, Saldívar falló en proveer los documentos que Selena quería. Tampoco fué al hospital.

A la media noche, Saldívar volvió a llamar para decir que estaba sangrando internamente a causa de la violación. Le pidió a Selena que fuera al motel sola, pero Chris persuadió a su esposa para que esperara hasta la mañana siguiente.

Selena salió temprano el viernes a ver a Saldívar en el Days Inn. Fueron al hospital, donde Saldívar admitió no haber sido violada. No hay testigos para lo que pasó exactamente cuando regresaron al hotel. Se presume que Selena despidió a Saldívar.

Una mucama que estaba limpiando un cuarto en el piso de arriba del hotel le dijo a la policía que las había oído gritando. Luego oyó un disparo. Miró por la ventana y vió a las dos mujeres corriendo por la alberca. Una estaba pidiendo auxilio asiéndose del pecho. La otra mujer tenía una pistola en su mano derecha. La mucama dijo que la vió apuntar y disparar el arma.

Selena llegó hasta el recibidor del hotel, donde el empleado de la oficina hechó llave a la puerta y llamó una ambulancia. Ella estaba sangrando profusamente de la herida del disparo en su espalda. Un testigo le preguntó quién le disparó. "Yolanda", dijo ella.

In la mano de Selena estaba el anillo de amistad que le había regalado Saldívar. No tuvo la oportunidad de regresárselo.

"La biblia dice que la venganza le pertenece a Jeová", dice Abraham. "Está en las manos de Dios ahora".

Mientras habla, Abraham está rodeado de docenas de turistas y otros que han venido a ver el estudio en Corpus Christi donde cantaba Selena. Como peregrinos en una misión, hicieron la trayectoria desde el Days Inn a la tienda de Selena, a la tumba de Selena y a su casa. Firman sus nombres en la pared dejan flores en la tumba. Muchos llevan camisetas de Selena y gorras compradas de falsificadores que buscan aprovecharse de la tragedia.

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